En Uruguay no están conformes con la designación de la FIFA para que el país albergue primeros juegos del Mundial

Alberto Avellaneda, un destacado periodista nacido en Uruguay y corresponsal de Radio 4 y del programa Radar en Costa Doce de Río de Janeiro, participó como invitado en un programa radial de un periódico nacional.

Durante su intervención, expresó de manera franca su descontento con respecto a la decisión de la FIFA de otorgar a la Asociación Uruguaya de Fútbol la responsabilidad de organizar el juego inaugural de la Copa del Mundo de 2030. Esta competición será una colaboración entre los países europeos de Portugal y España, junto con la nación africana de Marruecos.

Avellaneda opinó que la elección de Uruguay para albergar el juego inaugural de la Copa del Mundo de 2030 como un modesto tributo a los 100 años desde la primera Copa del Mundo, celebrada en 1930 en suelo uruguayo, refleja claramente su creencia de que la entidad rectora del fútbol mundial ha perdido su esencia.

Considera que ha sido influenciada en gran medida por la globalización política y económica, relegando la importancia de la historia que se escribió hace un siglo en el deporte más popular del planeta.

Fuertes declaraciones por parte de la selección sudamericana

Avellaneda, quien expresó su asombro por la decisión de la FIFA hace algunas semanas, admitió su sorpresa sin ocultarla, “Todos en Uruguay estábamos esperanzados en que la FIFA iba a tomar la decisión de otorgar ese Mundial del 2030 a la candidatura de Uruguay, Argentina, Paraguay y Chile por los 100 años que se cumplirán en ese año de la primera Copa del Mundo que organizó la FIFA y que se jugó acá, todo eso en contrapeso a la petición de los países europeos de España y Portugal más Marruecos serían nuestros competidores para organizar ese Mundial”.